Generalmente es fácil de comprender o al menos intuir, que se espera de nosotros . No solo nos lo han enseñado desde niños, sino que nuestro sentido común no acompaña y orienta en muchas ocasiones.
Estamos obligados a respetar una serie de normas propias de nuestra cultura, es decir de reglas que guardan relación con lo que se espera de nosotros como miembros de una sociedad e incluso de una legislación.
En tiempo de pandemia, existen una serie de protocolos que la ciudadanía debe cumplir irrestrictamente por el bien común. Usar el tapabocas en toda ocasión y hacer que la gente lo use también. Podemos lograr muchísimo contribuyendo a este clamor nacional sobre el cuidado y medidas de bio seguridad.
Todos los días tenemos mucho que decir, pero hoy quiero hacer énfasis en este tema. Veo que la gente no hace caso a la autoridad, y creo que debemos retomar las normas de urbanidad como un estilo de vida.
URBANIDAD la palabra urbanidad proviene del latín urbanitate, y ésta a su vez de urbs ("ciudad"). En tanto , la raíz urbs aparecen e varias palaras latinas como urbanitas que significa "civilidad", urbanidad, (buena educación em Roma), y "urbanus" (de la ciudad, es decir "urbano"). Actualmente, urbanidad es sinónimo de cortesía, comedimiento, atención y buenos modales. Po lo expuesto, es lo fundamental en todas las sociedades.
El conjunto de valores de respeto y cortesía, nos permiten encontrar bienestar en nuestras sociedades. En la cultura occidental, las muestras de urbanidad giran en torno a decir por ejemplo: "por favor" al solicitar algo; no gritar en la vía púbica; hablar en tono moderado; ceder el asiento a adultos mayores y embarazadas.
El término cortesía, se refiere a todas aquellas muestras de consideración y amabilidad hacia los demás.
Una persona cortés es aquella que mediante su comunicación, expresa deferencias (no diferencias) y respeto hacia la gente que la rodea. Vemos en la gráfica, a dos profesionales compartiendo sus actividades, pero cada una guardando las medidas básicas para la convivencia.
La cortesía implica implica también ejercer la tolerancia con aquellos que se comportan de manera desacertada.
Urbanidad y cortesía deben
ser nuestro norte cuando
interactuamos con los demás.
Pensemos en el espacio público, como un permanente y práctico examen de comportamiento en donde las personas que nos rodean serán los responsables de nuestra calificación.
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